Escribe Martín Campos
Villa María del Triunfo, Lima. Viernes 28 de julio del 2017, en tarde nublada y con sensación de frío, se dio el festejo taurino en la plaza portátil El Toreo, contando con lleno en los tendidos, ante cuatro astados, 2 y 2, anovillados, de la ganadería ayacuchana de los Hermanos Azurza, complicados, gazapones, bastos y que desarrollaron sentido el 1°, 2° y 4°, salvo el echado en tercer lugar que destacó, fue pronto y tuvo recorrido, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.
Gustavo Zúñiga: De blanco y oro, silencio y dos orejas.
Carlos Ramírez Morenito de Canta: De azul rey y oro, silencio y saludo.
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Amenizó el festejo la Banda Sensación Cora Cora, hubo
paseo de efigies de la Santísima Virgen del Carmen, San Antonio y San Pedro,
patrones del distrito ayacuchano de Chumpi.
Estuvieron en el callejón, de paisanos, el mexicano
Israel Téllez que actuará en La Unión, Arequipa, los españoles Paco Ramos y
José Antonio Carreiro, el colombiano Franco Salcedo; los nacionales Víctor Hugo
Garavito y los novilleros David Carrasco y Luis López, así como el matador
retirado, Jesús Colombo, padre del novillero sensación Jesús Enrique Colombo.
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Villa María del Triunfo es un distrito ubicado en la
perifieria sureña de la capital del Perú, donde el desierto costero se saluda
con las incipientes estribaciones andinas que han servido de base para el
asentamiento urbano de la población provinciana, convirtiéndola en signo de
pujanza y sacrificio, fiel a sus costumbres y tradiciones, como son la devoción
a sus advocaciones santorales y su arraigada afición taurina. El festejo de hoy
fue organizado por la Sociedad Humanitaria Hijos de Chumpi conformada
por residentes chumpinos en la ciudad, presidida por el Ing. Jaime Cayo Sanez.
Gustavo Zúñiga, abrió plaza ante el marcado con el número 119, negro zaíno, veleto y astifino, alto y basto que se le cerró ni bien tocado al capote propinándole un hachazo sin consecuencias. Pica en los medios de la plazita el experimentado Rafael López. Lidia canales y a los palos Camucho y Pedro Jorge. Brindis al público en los medios para coger la muleta a la que no acude el morito pues es reservón, escarba y no tiene fijeza yendo incierto. Luego una buena serie por derecha que remata con el forzado de pecho. Música. Sufre un desarme y el torete asienta sus dificultades, al sentirse tocado se lo piensa y ya no acude. Así las cosas desiste en el empeño el diestro colombiano y va por el acero. Estocada delantera y algo caída lo pasaportan. Saludo.
Con su segundo el que salió tercero, el mejor del lote
presentado por Azurza, negro listón, bonito de tipo, al que recibe con una
larga rodillas a tierra, el torito tiene mejor condición que sus hermanos, es
pronto, tiene movilidad y recorrido. Acude y pasa pero con la carita a media
altura, permitiendo mostrarse al caleño que sin embargo creemos pudo haberlo
aprovechado más. Hay una serie de buenos naturales y por la derecha son algunos
para el tendido. Corta de espadazo hondo y le conceden las dos orejas algo
benévolas. Vuelta al ruedo en el arrastre al toro.
Morenito de Canta, el nacional Carlos Ramírez, no las tuvo todas consigo esta tarde, no solo pechó con el lote más complicado pues sus dos toros mostraron malas ideas desde el principio, desarrollaron sentido muy rápido y no permitieron faena posible, sino que además se evidenció la contrariedad del diestro al no poder resolver la dura papeleta planteada. Al primero, segundo de la tarde, un negro muy bizco del izquierdo, luego del recibo por verónicas y chicuelinas que remata con la revolera lo brinda a la esposa del torero Denis Castillo, primera figura de los de plata en el Perú. El banderillero Santiago Arrieta El Santi pasa apuros y es trompicado al salir de la cara del toro. Pedro Jorge se luce en la brega que de poco a poco se va asentando como el subalterno del relevo nacional.
Aunque el toro en la muleta tiene buen lado derecho, sale
muy suelto y se frena. Lo lleva Morenito a una mano a los medios buscándole el
sitio pero nunca termina por asentarse con su oponente que no humilla es probón
y mete tornillazos. Recurre al toreo para el tendido y así se enciende la
música que acompaña los pases por alto y los desplantes de rodillas. Recula el
bicho y el torero canteño alista el estoque. Tras primer intento al encuentro
marra y en el segundo clava una media arriba que no resulta eficaz ni
suficiente. Pasa las de Caín con la cruceta y luego de dos avisos, que consideramos
innecesarios por parte del juez, la res es apuntillada. Silencio.
El cuarto, uno negro bragado, alto y basto, bien armado, cornivuelto con más cara que todos sus hermanos, pasa sin historia el primer tercio. Con la muleta es bueno el inicio del trasteo de rodillas en los medios. Llevándolo y dándole salida por fuera. Es mirón el morlaco y el nacional le aguanta un parón. Por naturales la historia no cambia y es más mirón aún por lo que el diestro no se confía. Vuelve a la diestra rodillas en tierra para torear al son de la música, desplante arrojando la muleta. Se queda corto el torito y lo pasaporta al tercer intento tras dos pinchazos. Saludo.
Las reses fueron challadas (acto ancestral de
pago a la tierra, común en las regiones andinas) con cerveza luego de ser
apuntilladas, por cada grupo oferente. Hubo al inicio estampa de morenada
puneña por jóvenes colegiales y baile de marinera a cargo de los niños Angela y
Aramís.
Un wacqra comunero tocó el waqrapuku o wacqa
waqra, instrumento de viento fabricado con los cuernos de toros de sonido muy
peculiar y que es particular del sur andino peruano.
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